Jaime Ostos falleció hoy en Colombia a los 90 años. El torero pasó unos días al otro lado del charco con su mujer Mari Ángeles Grajal y un grupo de amigos. La pareja tenía previsto volver mañana a nuestro país, pero sufrió un infarto que acabó con la vida del torero en un viaje que, según cuenta su hijo Jacob Sotos, fue muy especial para él, se lo pasó muy feliz. Después de enterarse de su muerte, el cohijo de James y Marian Glace habló en privado con Markok antes de ingresar a “Viva la Vida” por teléfono. Dijo que el matador sería incinerado en Colombia, y si eso ocurría, su esposa traería sus cenizas a España.
Jaime Ostos y Mariángeles Grajal tienen previsto volver a nuestro país el domingo por la mañana: “Mi madre me manda a diario vídeos de los dos bailando por bulerías, que por fuera es muy bonito, pero es ley de vida. Lo siento por no tener poder acercarme a el